Soy solo una
mentira, seré solo una mentira cuando todo esto termine, y después de eso lo
seguiré siendo. Porque cuando miré por última vez a James ya era un puro
engaño, porque cuando le dije que sí a Mitchell me mentía a mí misma, porque
cada vez que miraba lo que era mi vida me daba cuenta en lo que me había
convertido, y eso no era más que un vil ardid. Destinee Rumsfeld nunca había
sido esa persona, la había perdido en todo ese desastre, y sabía, muy adentro
de mí, que no la recuperaría. Se había difuminado con la lluvia de aquel día,
cuando me besó y no pude hacer más nada que observar cómo me perdía en un abrir
y cerrar de ojos, y luego fue empeorando, cada detalle me hizo más ajena a lo
que era, cada pequeña cosa solo hacía que el caos se hiciera más presente, cada
acontecimiento creó esta mentira, esta treta que creí justificar con vestidos
bonitos y eventos de Alta Sociedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario